Las charlas de José Arregi. Invitación a la espiritualidad

Por qué esta invitación
El mundo sigue en dolores de parto. Crece la angustia en las almas, y las farmacias no bastan para darles consuelo. Crece el daño global en el planeta, y los poderosos siguen imponiendo su ley mortífera.
Y las religiones, ¿dónde están y qué hacen las grandes religiones? Parecen ancladas en un pasado remoto, aferradas a la letra y a la norma, presas del miedo. “Levanto mis ojos a los montes: ¿de dónde vendrá la salvación?” (Salmo 121).
La salvación no llegará de lejos, no vendrá de fuera. La salvación sólo brotará de la tierra y de la carne, cuando aprendamos a inspirar y a espirar el Espíritu de Dios que todo lo habita.
Es urgente que nuestra civilización recupere el espíritu, la espiritualidad. Es necesario que una profunda espiritualidad de la belleza y de la bondad –sensibilidad, respeto, confianza, compasión, cuidado– tenga lugar en la educación como la asignatura más importante. Es apremiante que la espiritualidad -¿será esto candidez?– anime la política y a los políticos. Si no, caminamos al abismo.
Y es urgente que las religiones redescubran su inmenso caudal espiritual más allá de la moral y de la creencia. Está en juego la Vida, tan preciosa y frágil.
Las páginas que siguen responden a esta urgencia espiritual de nuestro tiempo. Son textos sueltos de 7 retiros o charlas impartidas en estos últimos años o meses. Varias están ya publicadas, pero aquí se reúnen retocadas y expurgadas de su aparato crítico.
Las dos primeras insisten en la necesidad de una lectura espiritual –y, por tanto, crítica – de nuestros textos cristianos fundantes: la Biblia y el Credo. Las dos siguientes trazan claves importantes de la espiritualidad que hoy necesitamos. La quinta y la sexta apuntan algunos rasgos de dos grandes figuras espirituales: Francisco de Asís (Italia, ss. XII-XIII) y Pedro Casaldáliga (Brasil, ss. XX-XXI). La última ofrece unas reflexiones sobre la transición en que se halla la llamada “Vida Religiosa”, ejemplo de las transformaciones estructurales que está demandando al cristianismo el cambio social y cultural en que estamos inmersos. El Espíritu gime en nosotros.
(De la Introducción del libro)

Ed. Feadulta.com, Madrid 2010