De tu hermano Francisco
Tu hermano Francisco: ¡Salud y paz! Fui y sigo siendo un pobrecillo, y esto me infunde confianza para dirigirme a ti, seas quien seas, estés donde estés. No tengo nada que enseñarte, nada que mandarte, nada que pedirte. Sólo quiero contarte, como pobrecillo que soy, lo que a mí me pasó, y decirte que Dios […]